Pretty Little Liars 7×13: Más de lo mismo pero un poquito mejor
Es bien sabido por todos que Pretty Little Liars es la primera serie fast food de la historia de la televisión. Sabes que es una auténtica basura e incluso que poco a poco te irá quitando años de vida, pero quién niegue que es la persona más feliz del mundo consumiéndola, miente. Pero no nos importa lo más mínimo porque si hemos salido ilesos del fracaso de Barei en Eurovisión o del 3×07 de The 100, tenemos la vaga sensación de que podemos con cualquier cosa que nos echen y esto, obviamente, no iba a ser menos.
Solo quedan siete capítulos para que la serie que nos da la vida y nos la quita, a partes iguales, finalice y nosotros no sabemos si reír o llorar. Mientras nos debatimos en este profundo debate emocional será mejor que pasemos a comentar cómo narices ha ido la semana en Rosewood aunque a estas alturas si cayese una bomba nuclear en la mitad del pueblo nos harían un flaco favor a todos, incluidas las protagonistas. ¡Sigue leyendo! Aunque te toparás con algún que otro spoiler en tu camino.
El juego de “A” sigue en marcha y no para cebarse con Aria que no puede tener un mayor tufo a “irrelevant person” en toda esta historia. El de la sudadera negra esta vez quiere divertirse a costa de Hanna y nosotros sufrimos porque es la única de todas las protagonistas que parece no estar muerta por dentro en cualquiera de sus intervenciones y eso es algo que debemos de agradecer capítulo a capítulo ya que otras como Emily reaccionan del mismo modo tanto si se golpean el meñique del pie contra un mueble como si se encuentran cocinando un puré de espinacas. Minipunto y punto para la Marin.
“A” no solo ha conseguido que toda la prensa piense que el diseño de mayor éxito de su colección es plagiado, sino que ha mandado a Caleb al hospital y la ha obligado a acudir a una reunión de negocios con un vestido tan corto que parece sacado del fondo de armario de Yola Berrocal. Claro, aquí se huele el drama desde lejos porque los socios en cuestión que esperan para reunirse con Hanna son japoneses y ya sabemos todos lo conservadores que son. Leave Hanna alone!
Después de todo este drama, Hanna no logra hacerse con la pieza del puzle del tablero y es que todo no se puede tener en la vida. Cabe destacar que mientras que esto sucedía Spencer se ha pasado el capítulo jugando al Ping Pong con el policía latino macizo que tan locas del pussy nos vuelve. ¡Ella si que sabe! Proud of you little Hasting!
Además, no es la única alegría que ha debido llevarse la chavalita porque de un capítulo para otro se han cargado a Yvonne. ¿Yvonne Reyes? Os preguntaréis. No. Yvonne, la novia de Toby. No es que nos alegremos de esta pérdida porque tampoco somos tan bitches pero la creación de esta carpeta tan sumamente innecesaria no nos hacía ninguna gracia y más cuando se han pasado media serie vendiéndonos la historia de Spoby. ¡No habíamos venido aquí pa’comernos esta mierda! (Como ya dijo la ganadora de GH 15 en su día)
Para hacerlo todo más dramático Yvonne finalmente despierta del coma, se termina casando con Toby en una ceremonia exprés en la misma habitación del hospital y justito después, ¡hasta luego Maricarmen! Más tarde aparece Spencer y la muy falsa se tira al suelo a llorar abrazada a Toby. Nena, mira, no. En la vida hay que ir de cara y si la señora que acaba de morir te parecía más bicha que Taylor Swift pues para adelante, no te nos bajes las bragas de esta mala manera, tía, porque se te ve el plumero a sesenta kilómetros a la redonda.
Como todo este capítulo estaba siendo un auténtico despropósito y los creadores de esta serie tienen muy pocos escrúpulos, nos han vendido que Aria y Emily son inteligentes. ¡Y nosotros nos lo hemos creído! Aria se ha pasado siete años más preocupada por que el tamaño de sus pendientes aumentara conforme iban avanzando las temporadas y Emily… En fin, ¿qué más tenemos que decir de ella a estas alturas?
De repente, y como si fuese tomado un curso a distancia durante los cinco años que pasaron desde la última temporada, Aria sabe usar el ordenador para algo más que jugar al buscaminas e incluso conoce la manera de hackear teléfonos. ¿Apesta a sospechoso? Sí, pero la vida no es tan maravillosa como para que una de las protagonistas acaben siendo “A.D” así que este papel acabará cayendo sobre algún personaje de la temporada dos que con un poco de suerte aún recordaremos su cara.
Con estos nuevos conocimientos, Aria y Emily, comienzan a investigar a Sidney Driscoll, esa chica irrelevante que hace un par de temporadas apareció un par de capítulos para ser la inseparable de Jenna. Bueno, vale, incluso hemos tenido que buscar su nombre en Google para contaros un poco más sobre ella, pero lo que es cierto es que la chica parece esconder algo muy oscuro, aunque conociendo a nuestra Marlene King me da en la nariz que todo esto es una artimañana más para tenernos entretenidos durante un par de capítulos más.
Solo esperamos que todo lo aprendido acerca de informática no se le borre de la cabeza a Aria de un plumazo porque hay algo que no vio venir ni de lejos y es que amigas, amigos, Nicole se ha presentado en su casa sin previo aviso y la cosa promete ser de lo más incómoda. Y es que, ¿qué cara pones cuando la chica que se ha estado cepillando a tu novio aparece en tu salón de la nada?
Aunque es innegable que la tal Sidney es a little sospechosa porque aún mantiene relación con Jenna y porque, agárrate bien las braguitas, le hace algún que otro recado a “A.D”. Guau, ¿no? En fin, nosotros pa’por si no queremos depositar mucha confianza en toda esta trama porque ya sabemos como se las gasta el equipo de guionistas. Además, si Aria y Emily son las que están detrás de toda esta investigación seguramente anden muy alejadas de la verdad.
Mientras Yvonne casca, Caleb está en el hospital y el trabajo de Emily y Aria, de momento, queda en nada, la policía recibe un dedo cortado de Jessica Dilaurentis (Insertar aquí música de culebrón venezolano) y no solo eso, sino que la cadena ya se encuentra lanzando promos a bombo y platillo sobre un anuncio que llevamos esperando desde hace mucho: ¿quién mató a Jessica Dilaurentis? Y es que al parecer el nombre del asesino será descubierto en el próximo capítulo pero no nos hagamos demasiadas ilusiones.
Así están las cosas, chavales. Las liars se encuentran sumergidas en una situación de la que ni ellas mismas saben salir y nosotros lo estamos gozando como los que más. De momento tendremos que esperar una semana más para comprobar como puede empeorar la vida de Emily y sus amigas. Mientras tanto, nosotros, seguiremos intentando descubrir quién se esconde bajo la sudadera negra más famosa de la televisión. ¿Y a ti, que te ha parecido este capítulo?
Fran Luna
