Icono del sitio Seriéfil@s Enfurecid@s

Adiós, Carrie Fisher: que la fuerza te acompañe

Hace unos días fallecía Carrie Fisher, la actriz que puso cara a la adorada Leia Organa en la saga Star Wars. En el mundo seriéfilo, apareció en series como The Big Bang Theory o 30 Rock. Pero eso no es, ni muchísimo menos, todo lo que esconde la historia de esta fascinante mujer. Adicción a las drogas, trastorno bipolar, el sexismo en la industria cinematográfica… son algunas de las cosas que tuvo que enfrentar, y no lo hizo de forma silenciosa. Carrie se convirtió en una poderosa activista e inspiró a muchas mujeres de nuestra generación. ¿Quieres saber más?

Sin ninguna duda, la primera razón por la que Carrie Fisher es considerada una inspiración es el personaje de la princesa Leia en la famosa saga Star Wars. ¿Cómo podría ser de otra manera? Leia es valiente y decidida; se trata de una princesa que lidera una rebelión. Sin ir más lejos, en el episodio IV, recién rescatada por Han Solo y Luke, es ella quien encuentra una vía de escape cuando ninguno de ellos tiene un plan de huida.

No es una damisela en apuros, nada más lejos de la realidad. Se trata de un cambio importante en la definición de los personajes femeninos en las ficciones. Es una princesa, sí, pero no tiene nada que ver con las que se habían conocido hasta el momento. Es un personaje fuerte e independiente.

Si bien esto es estupendo, Carrie explicó después que no es oro todo lo que reluce. Para volver a interpretar el papel de Leia en El despertar de la fuerza (2015) la presionaron para adelgazar unos 15 kilos.

No sólo eso: la escena más representativa de fuerza que tiene su personaje en toda la saga, el momento en el que la princesa mata a Jabba… está hipersexualizada. Se trata de una imagen muy famosa, pero es conocida como “la escena del bikini dorado”. Porque es lo que más destaca: Leia está medio desnuda.

“The only way they knew to make the character strong was to make her angry. In Return of the Jedi, she gets to be more feminine, more supportive, more affectionate. But let’s not forget that these movies are basically boys’ fantasies. So the other way they made her more female was to have her take off her clothes.”
“La única manera que conocían de hacer el personaje [de Leia] fuerte era hacerla enfadada. En El Retorno del Jedi, se presenta más femenina, como un apoyo, más afectuosa. Pero no nos olvidemos de que estas películas son básicamente fantasías masculinas. Así que la forma de hacerla más mujer era quitarle la ropa.”

Fragmento de una entrevista para The Rolling Stone, 1983.

Fisher criticó este hecho con dureza, y manifestó abiertamente su incomodidad con estas imágenes. De hecho, en una entrevista con Daisy Ridley (Rey en El despertar de la fuerza) para Interview Magazine, Fisher le dijo que pelease contra esto para no ser “una esclava como ella lo fue”. Además, en otra entrevista, en este caso con NPR en 2016, explicó que en El Retorno del Jedi tenía muchas ganas de matar a Jabba a causa del bikini que le habían obligado a llevar. Como consecuencia, muchos fans se han mostrado indignados ante algunos de los “homenajes” que han aparecido en redes sociales tras su muerte, que incluían fotografías de Carrie con dicho bikini.

Se trata sólo de un ejemplo de muchos otros casos en los que la actriz se involucró en un tema que consideraba importante. Fisher era feminista, sí, y llevó a cabo una incansable labor activista, pero no se limitó a esto.

Fisher, con sus compañeros de reparto en el set de Star Wars

Carrie sufría también trastorno bipolar. Sin embargo, en lugar de esconderlo, lo reconoció abiertamente. Trató siempre de explicar la realidad de este problema para que la gente lo entendiera y no lo estigmatizara.

“I am mentally ill, I can say that. I am not ashamed of that. I survived that, I am still surviving it, but bring it on. Better me than you.”
“Estoy mentalmente enferma, puedo decirlo. No me avergüenza. Sobreviví a ello, sigo sobreviviendo, pero venga. Mejor yo que tú.”

Su lucha contra los estigmas del trastorno bipolar ayudó a muchos jóvenes con este problema (y otro tipo de trastornos mentales) a aceptarse, a luchar con la misma fuerza con que ella lo hizo y a lidiar con ello sin avergonzarse o esconderlo.

Además, Fisher luchó también con una fuerte adicción a las drogas y al alcohol. En uno de sus libros, Wishful Drinking, publicado en 2008, habla de ello sin tapujos. Durante la producción de alguna de las películas de la saga Star Wars, por ejemplo, se encontraba en una época terrible en este sentido.

“I did so much cocaine on Star Wars set that even John Belushi told me I had a problem.”
“Me metí tanta cocaína en el set de Star Wars que hasta John Belushi me dijo que tenía un problema.”

Comenzó a consumir esa droga en el rodaje de El Imperio Contraataca. Pasado cierto tiempo, se dio cuenta de que estaba empezando a perder el control de sus adicciones.

“It’s always been my responsibility. If it was Hollywood to blame, then we’d all be dope addicts.”
“Siempre ha sido mi responsabilidad. Si la culpa fuera de Hollywood, todos seríamos drogadictos.”

Fisher presentó batalla y, después de una dura recuperación, salió vencedora.

En su carrera como actriz no sólo apareció en la saga de Star Wars, sino que también pudimos verla en películas como Cuando Harry encontró a Sally (no me lo creía cuando me di cuenta de que era ella, pero sí: Fisher hace de Marie, la mejor amiga de Sally), entre otros.

La adicción a las drogas fue un problema importante, que afectó en gran medida a su desarrollo profesional y mermó las películas en las que pudo participar tras el rodaje de La Guerra de las Galaxias.

Fisher, como Marie en When Harry Met Sally

Carrie no sólo era actriz, en cualquier caso. Su talento como escritora la llevó a convertirse en guionista y revisora de guiones. Es decir, que no participaba lo suficiente en la autoría como para que se reconociese como suyo, pero cambiaba diálogos y modificaba de forma definitiva los guiones de algunas películas y series. Editó, por ejemplo, los manuscritos iniciales de Hook, Arma Letal 3, entre otros, y la serie Las Aventuras de Indiana Jones.

No pueden olvidarse tampoco los cambios que introdujo en algunos diálogos de Star Wars, al igual que Harrison Ford. Este trabajo no constituyó una revisión del guión como tal, sino que como actriz cambiaba las frases para adaptarlas a lo que diría su personaje. Si queréis leer de primera mano lo que explicó al respecto la propia Carrie, no dejéis de leer esta entrevista.

Carrie Fisher junto a su madre, Debbie Reynolds, que falleció un día después de su muerte, y su hija, Billie Lourd

Además, publicó gran cantidad de libros. Uno de los más famosos, Wishful Drinking, habla de sus adicciones, principalmente del alcoholismo y los problemas que le acarreó, de forma humorística y también muy cercana y sincera.

De hecho, escribió también un monólogo homónimo sobre este mismo tema y algunos otros, como su situación familiar. Si queréis verlo, lo tenéis colgado en youtube; está en inglés y no tiene subtítulos en español. Pero los que tengáis HBO estáis de suerte; podéis buscarlo en el catálogo español del canal.

“Para los que sean jóvenes, intentad pensar en Eddie, mi padre, como Brad Pitt; en Debbie, mi madre, como Jennifer Aniston; y en Elizabeth Taylor como Angelina Jolie. ¿Ayuda a entender los enredos de mi familia?”

Su último libro, The Princess Diarist, publicado en 2016, son sus memorias. De hecho, justo antes de morir se encontraba haciendo una gira de promoción del mismo. En él habla, entre otras cosas, del romance que mantuvo con Harrison Ford (Han Solo) durante el rodaje de la saga original de Star Wars.

Carrie Fisher ha sido y será un icono para nuestra generación, una inspiración feminista y una fuente de fuerza para aquellos que luchan cada día con adicciones y trastornos mentales. Y, en realidad, para cualquiera que la haya conocido y aprendido de ella. Tenía 60 años cuando murió, y la mayoría pensamos lo mismo: todavía le quedaba mucho por vivir, por compartir. Este año se han ido grandes personajes, y vamos a tener un 2017 un poco más difícil sin ellos.

Pero el otro día leí un post que me hizo pensar; “sé el héroe que 2016 se te ha llevado”. Y me pareció precioso. Porque, en realidad, mientras quede alguien inspirado por su legado, Carrie Fisher seguirá haciendo historia.

Descansa en paz, space momma. Te cogemos el relevo.

“George [Lucas] se me acerca el primer día de rodaje, echa un vistazo al vestido y me dice “No te puedes poner un sujetador debajo de ese vestido”; así que yo le digo “Vale, voy a picar, ¿por qué?” y me dice “porque no hay ropa interior en el espacio”. Prometo que es verdad, ¡y lo dice con tal convicción! Como si hubiera ido al espacio y mirado a su alrededor, y no hubiera visto ni sujetadores, ni bragas, ni calzoncillos por ninguna parte.
Ahora, George vino a mi show cuando estaba en Berkeley. Vino al backstage, y explicó por qué no puedes llevar sostén en otras galaxias […]. Así que, lo que lo que pasa es que vas al espacio y no pesas nada. Hasta ahí bien, ¿no? Pero entonces tu cuerpo se expande. Pero tu sujetador no, así que quedas estrangulada por tu propio sujetador. Ahora creo que ese sería un fantástico obituario. Así que les digo a mis amigos más jóvenes que, no importa la forma en que  me vaya, quiero que se informe de que me ahogué a la luz de la luna, estrangulada por mi propio sujetador.”


¡No te pierdas nada!

Síguenos en nuestras redes y échale un ojo a todas las novedades. Recordad que podéis encontrar merchandising de vuestras series favoritas aquí, en la tienda online de Seriéfilos Enfurecidos.

Salir de la versión móvil