12 Campanadas, 12 Series: Sons of Anarchy

Día número 2 del parón navideño: *seriéfilo ingiriendo cantidades ingentes de chocolate para superar la depresión*.

Chicos, chicos, no os preocupéis, que no cunda el pánico, que ya os traigo yo la segunda tanda de ¡12 series para las 12 uvas! Así que respirad hondo, que todos juntos podemos superar estos difíciles momentos.

Hoy he venido a hablaros de mi libro de la que es mi serie favorita desde hace unos meses y tengo la firme creencia de que lo será durante mucho tiempo. Desde que la terminé, casi casi he formado una secta de adoración a Jax Teller y me dedico a darle el coñazo a todo el mundo para que la vea y vosotros no vais a ser menos. Bien, dicho esto, empezamos  Sons of Anarchy, o Hijos de la Anarquía en España, es una serie de FX, que comenzó en 2008 y finalizó en 2014 con 7 temporadas.

¿Que por qué tenéis que ver esta serie? Porque esta serie engaña, y mucho, no es una serie sobre un motero rebelde (que casualmente está de muy buen ver) y su club, NO. Kurt Sutter, guionista, director, creador de la serie y  personaje recurrente en ella, consigue sin que te des cuenta que seas uno más del club y que le hagas honor a la chupa y al parche. Consigue que se te desencaje la mandíbula y entres en un estado de shock en el cual ni siquiera eres capaz de escribir a tus amigas que ya la han visto “TÍA TÍA TÍA, QUÉ FUERTE”.

Otro motivo para verla es la espectacular banda sonora que tiene, sí, sé que esto siempre se dice, pero esta vez, va muy en serio. La intro, que si la primera vez que la escuchas ya te gusta, cuando estás terminando la serie la cantas a pleno pulmón con tu mejor voz rota. El resto de canciones que acompañan las 7 temporadas, perfectamente escogidas, hacen que capítulo a capítulo se te ponga la piel de gallina. Os dejo una pequeña muestra (ojo a lo que bucáis, que spoiler podréis encontrar):

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Una de las cosas que me encantan de esta serie y de la que pocas de las series actuales pueden presumir, es que cuenta una historia, de principio a fin, sin estirar más de lo que se debe la serie, sin dejar que pierda calidad con las temporadas porque ya no se sabe qué contar. No, de hecho, SoA es todo lo contrario, como toda historia, te tiene que poner en situación, en la primera temporada. A partir de ahí, es una montaña rusa que solo sube y sube, porque pensarás constantemente :”Venga Kurt, ¿cómo vas a mejorar esto?”, pues lo consigue, os juro yo que el genio, lo consigue, hasta llegar al final más perfecto que he visto hasta ahora.

Por último, y os acordaréis de estas palabras cuando la terminéis, ¿dónde tienen los ojos la crítica? Ni un Emmy tiene y solo un Globo de Oro a Katey Sagal, que no seré yo la que diga que no se lo mere, pero es que se merecen 80 más. Y repito, que yo esto lo digo no para que penséis “Pues si no tiene premios, tan buena no será”. NO, no caigáis en eso, lo digo para haceros partícipes de esta injusticia y que os cabreéis conmigo.

Pero ahora diréis: “Sara, lerda, que no nos has dicho ni de qué va”. Pues tenéis toda la razón del mundo y es que cuando menos sepáis de la historia más la disfrutaréis, pero bueno, si insistís, os puedo decir que la historia comienza cuando Jax encuentra un manuscrito de su padre sobre cómo le gustaría que fuera el club, Samcro, y desde entonces, afronta los problemas de su vida y los del club, con otros ojos, y hasta ahí os voy a decir.

Espero que todo esto haya servido para que os entren ganas de coger un bol de palomitas y empezar la serie ya mismo, y si no, empezadla igualmente, y prometo no decir que ya os lo dije. Y con esto y un bizcocho, ahí os dejo.