This is Us 1×03: He's okey. I'm okey
Después de empezar demasiado pronto con los parones, This is us vuelve una semana más para sorprendernos con nuevos secretos y, como no, darnos un pellizco al corazón con tanta ternura.
Después del sorprendente cliffhanger con el que nos dejaron hace dos semanas donde vimos que en la actualidad Rebecca, la madre de nuestros niños, estaba nada más y nada menos que con Miguel, el amigo de Jack que vimos en los flashbacks, descubrimos que sí, que efectivamente están juntos y no había ningún truco en la escena.
El capítulo ha estado principalmente centrado en Randall o, como se llamó durante algunos días, Kyle. Y es que en un sutil pero claro flashback, nos enseñan como William y la madre de Randall se conocieron en aquel autobús. Como comenzaron una relación entre y ellos y con las drogas. Y como, finalmente, William se vio solo con un bebe que tuvo que abandonar en una estación de bomberos.
Por otro lado hemos visto como en el pasado, los padres primerizos estuvieron a punto de enloquecer tratando de cuidar a los bebés. Si ser padre por primera vez, cuando te ves con tres del tirón, tiene que ser horrible. Y más cuando uno de ellos no es tu hijo biológico y tanto él como tú, parecéis notarlo.
En los flashbacks hemos visto como Kate y Kevin incluso necesitaban estar el uno con el otro para domir, mientras que Kyle Randall iba por libre. En la actualidad no es muy diferente, ya que al fin y al cabo Kate y Kevin son una extensión el uno del otro. Por eso mismo cuando Kate intenta hacer su vida con Toby, no puede evitar anteponer a su hermano cuando la necesita.
Kevin, que se encuentra en ese lapso de tiempo entre “he mandado todo a la mierda” y “me quiero ir a Nueva York pero no arranco” trata de arrastrar a su hermana con él. Siempre han estado juntos, siempre han sido ellos dos, ¿por qué iba a ser diferente esta vez? Pero Kevin es mucho más listo de lo que parece, así que cuando se da cuenta de que su hermana siempre lo pondrá primero, corta por lo sano y la “despide” de ser su asistente. Él necesita hacer su vida en Nueva York y por eso mismo tiene que dejar que su hermana haga lo mismo con Toby.
Y es que el santo de Toby se merece un poco de atención. El muchacho se la está ganando a la fuerza ya que es un encanto. Güeno, güeno. Por eso mismo nos alegramos de que por fin haya podido pillar cacho en condiciones después de tantas idas y venidas. Toby, estamos contigo, cuida a nuestra Kate de ella misma.
Volviendo a la trama principal, el gran conflicto del capítulo ha sido la casualidad de tener bajo el mismo techo a la madre adoptiva y el padre biológico de Randall. Y probablemente nadie esperábamos lo que venía hasta que no hemos visto el interés de Rebecca en hablar con William.
Bien pues estos dos sí que se conocían de antes. Es más, de mucho antes, de 36 años atrás. Ya que cuando Rebecca y Jack salieron del hospital con los chicos, William se encontraba en la acera de enfrente observándolos. Tal vez asegurándose de que su hijo acabara en buenas manos. Pero ahí no quedó todo, ante la duda de no poder criar a Randall en condiciones por no ser hijo biológico, Rebecca se encargó de buscar a William y enfrentarlo. Saber el por qué. Y aunque él hizo un intento de que le dejara tener contacto con su hijo, sí que fue el que le dio la idea de que tal vez deberían ponerle un nombre diferente al niño. Ya que Kyle era el nombre original que recibiría el tercer trillizo, era un nombre para otro niño, no él. Así que Rebecca no duda en preguntarle el nombre del poeta del que siempre le leía a la madre del pequeño, y ahí fue donde Kyle pasó a llamarse Randall.
Es lógico que Rebecca no quisiera cuentas con William. Si abandonó al niño, lo abandonó con todo lo que conlleva. Y si ellos aceptaron hacerse cargo de él y criarlo como sus padres, así sería.
En el presente, este encontronazo no sienta muy bien a William que no tarda en intentar poner tierra de por medio, sin embargo Randall está más rápido que él y lo evita. Las noticias que vienen después no son mucho mejores cuando la visita al oncólogo confirma que ya no es solo cáncer de estómago y que hay metastasis. Ahora solo queda decidir entre dos opciones. Dejar salir a William de su vida como hasta ahora o aprovechar el tiempo que queda conociéndolo, conociendo la historia él y su madre y diciéndole a las niñas quien es realmente.
Está vuelta atrás en los flashback no nos ha resuelto nada del desaparecido Jack en el presente. Los problemas entre él y Rebeccaa en el capítulo pasado y el final del mismo, nos dejaron muy locos hace un par de semanas y tiene pinta de que tardarán en resolvernos el gran misterio.
Sin embargo ha sido un placer volver a ver al doctor que asistió el parto. Este hombre además de hablar tan bonito como habló en el primer capítulo, tiene algo que hace que te encante. Este hombre debe durar en la serie, que sea el médico familiar de Rebecca y Jack o algo porque no puede desaparecer.
¿Qué será de Kevin en Nueva York, volverá arrepentido? ¿Irán definitivamente más en serio Kate y Kevin? ¿Como será la nueva relación entre William y la familia de Randall? ¿Cuantos secretos nos quedan por saber aún?
Almu Hache
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