Pasa una cuarentena de serie
Día mil del confinamiento y la redacción de Seriéfilos Enfurecidos ya empieza a estar un tanto delulu. Bueno, más que de costumbre. Las series ya no nos son suficientes para amenizar nuestra jornada y llenar nuestro vacío existencial perpetuo (¡¿Quién lo diría?!). Ha llegado el momento de buscar el modo definitivo para desconectar por un solo día de todo lo que está sucediendo. Cojan papel y boli porque a continuación te diseñamos un calendario para pasar una cuarentena de serie.
10:00 – UN NUEVO DÍA
En el momento en el que paras esa horrible alarma, que aún conserva un horripilante sonido predeterminado que bien podría ser el tono de llamada de tu abuela la del pueblo, es el punto exacto en el que estás listo para empezar un nuevo día.
Da un par de palmadas para pedir a tu Chanel #5 particular que aparezca por la puerta con una amplia variedad de pijamas para elegir. Cualquiera puede ganarse el status de Chanel pero sobre todo los hermanos pequeños. Amenázale con echarle abajo la isla del Animal Crossing si no se presta al show.
Hazte un par de selfies con el filtro del perrito como una buena influencer básica y, ahora sí, estás lista para enfrentarte a un nuevo día en esa jaula de pladur.
11:00 – EL ARTE DEL DESAYUNO
Sigamos tomando referentes. Entremos en el mood Gossip Girl y dejemos a un lado tus tostadas semiquemadas con el zumo de naranja grumoso. Aquí hemos venido a darle un vuelco a la monotonía y ese es nuestro objetivo.
Es el momento de preparar un banquete que haría humedecer las bragas de Serena Van Der Woodsen. Por ser un día especial apostaremos por unas tostadas francesas (que es como llaman estudiantes de Derecho + ADE del efecto Tusa a las torrijas de toda al vida), acompañadas de fruta del tiempo y una mimosa. La mimosa es imprescindible porque el alcohol nos hará más llevadero el día. Los orfidales tras el desayuno ya son elección del consumidor.
12:30 – EL DESARROLLO DE UN BEST SELLER
En tu día a día depositas tu confianza en Patry Jordán para poder seguir vaciando la despensa como una buena gorrina. Totalmente lícito. Nos quitarán la libertad pero jamás el chocolate, también te lo digo.
Hoy aprovecharemos este encierro como si fuésemos concursantes de Gran Hermano pero con un coeficiente intelectual superior al de un escarabajo pelotero. Adquiere legalmente (wink wink) un programita apañado de escritura y saca a pasear a la Carrie Bradshaw que llevas dentro. Que la cuarentena te inspire y ya que vas a estar encerrado en casa hasta enero del 2030 al menos gánate la vida, ¡tío perro!
14:00 – ALMUERZA CON TUS AMIGAS (O INTÉNTALO)
Es el momento más esperado del día. Arréglate como si fueses al funeral de tu ex pareja. Sé como las protagonistas de Pretty Little Liars y no perdones ni un solo día para quedar con tus amigas a la hora de la comida. El menú es lo de menos, lo importante son las conversaciones en las que profundizar en temas como: ¿por qué el profesor de arte no quiere lío?
Márcate una buena videollamada, come y lanza la sospecha de que si el motivo por el que no se ha unido esa otra amiga a la quedada virtual podría ser el hecho de haber pillado el coronavirus. Que no sea por temas de conversación.
16:00 – EL GOLPE PERFECTO
¿Tu empresa te ha hecho un ERTE que te ha dejado la cuenta corriente tiritando? ¡No pasa nada! ¡Don’t stop the party! Ya no será un problema el tener en el frigorífico solo un limón con moho, tres zanahorias y una lata abierta de berberechos. ¿Qué haría Tokio? ¿Qué haría el profesor?
Concéntrate y planea el atraco perfecto al Mercadona de la esquina. Ya está bien que esos cuatro octogenarios impedidos te dejen sin un rollo de papel higiénico con el que asear tu ano de manera adecuada. ¡Se acabó limpiarte el culo con la Cuore de tu madre!
Es el momento de mentalizarte en que en tiempos desesperados se han de tomar medidas desesperadas. Llevas cinco días sin comer algo que no sea pasta recalentada y es de humanos darnos un caprichito de vez en cuando. Aunque haya que planear un atraco. Punto.
17:30 – PERFORMANCER DESDE CHIQUITITA
Tus dotes artísticas no conocen límites y es que es bien sabido que te encanta montar un buen show en la intimidad. Los organizadores de la Super Bowl deberían temblar ante los conciertos que se cuecen en tu coche en el momento que reproduces el último tema de Becky G. Cantante y perreona, todo lo tienes, hija mía.
Como si de un miembro del Glee Club se tratara (sin contar a Rachel por ser un ser extremadamente insoportable) llega el momento de montarte tu propio espectáculo. Tira de todo el atrezzo posible para decorar la realidad y olvidar que llevas dos semanas en casa y que la raíz del tinte pronto te llegará a la altura de las orejas.
Recurre a YouTube y sus miles de instrumentales posibles. Olvídate de señoros que llevan explotando las canciones de desamor desde el 2010 y eso conlleva no contar en el repertorio con la presencia de Manuel Carrasco, Alejandro Sanz, Pablo López, Pablo Alborán… Añádete una Dua Lipa, una Natti Natasha, una Chenoa… Gente que probablemente podría curar esta pandemia con su música.
19:30 – TIEMPO PARA EL DRAMA
Volvamos a entrar en contacto con la realidad. Por unos minutos. Es el momento de responder al WhatsApp de tu amiga quejándose de la vida sexual de su novio. La relación va a pique a raíz de que ambos intentaran hacer uso de una bombona de butano como juguete sexual en sus momentos más íntimos. Tú llevas meses sin catar nada pero nada de eso te impedirá dar consejos como si de un protagonista de Sex Education se tratara.
Chica, que no sea por la buena intención.
21:00 – QUE TE QUITEN LO BAILAO
Vale, estaremos en cuarentena pero ahora lanzo una pregunta: ¿es ese motivo suficiente como para no salir de fiesta un viernes por la noche? Perdóname que te diga pero no, mi ciela.
Móntate LA FIESTA. En mayúsculas. Tu habitación será tu propio Teatro Barceló y ya de ahí para arriba. Ponte unos buenos temazos para perrear contra la foto de comunión que inexplicablemente sigues manteniendo en tu habitación y siéntete como un protagonista de Élite. Eso sí, aquí nada de azúcar glas adulterada que nos conocemos.
Saca del escondite esa botella de Sheriton medio caduca que guardas aún del cumpleaños de tu prima y ponte ciega mientras conmemoras los primeros videoclips de Shakira cuando aún no era una mamarracha y tenía asuntillos pendientes con hacienda. Que no pare la fiesta. Llama borracha como una cuba a tu mejor amiga y hazle cantar contigo un par de estrofas del tú me dejaste caer pero ella me levantó. Himno entre los himnos.
Cuando estés tan pedo que confundas a la silla giratoria de tu escritorio con un chulazo es el momento de parar e irse a la cama, amiga. La fiesta se termina y con ella este día de cuarentena seriéfila que te hemos organizado casi sin pensarlo.
Es la hora de volver a la realidad. O no.
Fran Luna
