Fear the walking dead 2×12-15: fin de temporada

Antes que nada, quería pedir perdón por mi el retraso. Lo bueno de esto es que tenéis un multipost concentrando todo lo ocurrido en los últimos capítulos de esta segunda temporada (emoji de la gitana bailando). Sin más dilación, pasen y vean, queridos enfurecidos, no sin antes recordar que ¡este post está plagado de spoilers!

2×12 Pillar of salt

Empezamos con Francisco y su familia huyendo de La Colonia. Obviamente, usando el recurso de la sangre OTRA PUTA VEZ.

Inspiro. Espiro. Suspiro. Sigo.

Pero las cosas no son tan fáciles en el mundo fear y Marco, el dueño de “El Pelícano”, consigue atraparlos. Marco busca al grupo de refugiados para poder arrebatarles todo el oxy y así abastecerse por sí mismo. Por ahora parece que mantienen la boca callada… Dudo que sea por mucho tiempo…

Debido a esta huida, Antonio saca su dark passenger a la luz. El farmacéutico más arrogante de la historia de la televisión no está dispuesto a ver cómo sus feligreses abandonan la villa. Les prohíbe tanto a Luciana como a Nick ir al súper en busca de agua ni de cualquier otro bien. La lucha por el poder ha comenzado en Villa Pastilla.

Mientras, observamos cómo Marco ha conseguido encontrar el paradero de La Colonia. Se avecina una guerra campal y llega en el peor momento posible. ¿Es el fin de Alejandro? Veremos.

Por fin conocemos el paradero de Ofelia tras la charla con Alicia. En efecto, la última Salazar con vida es la persona que se ha llevado el coche de Maddie y cía. Desde luego que o tiene muchas ganas de perder su vida o muy avispada no es la chica.

Estamos hablando de Ofelia, la más débil del grupo. Ésa que se quedaba en el barco mientras los demás inspeccionaban el terreno a todas horas. Ésa que no tiene más trama que llorar la muerte del fallecido de turno. Sí, ésa, ha salido despavorida en busca de su amor.

Porque resulta que la chica tenía un novio la chica tenía un novio que la llevaba a la bahía, que le decía vida mía, que le decía qué calor, qué calor qué calor que tenía, qué guapa era y qué tipo tenía. Un novio el cual podría haberse convertido en marido pero visto lo visto me da que se fue con el rabo entre las piernas a México, dejando a nuestra querida (ejem infinito) Ofelia compuesta y sin novio. Muy a pesar de las palabras de su propia madre que, a través de flashbacks, vuelve a nuestras vidas durante unos minutos para decirnos…

“Que el horror del mundo no infecte tus sueños”. Pues muy bien dicho Griselda, gracias por venir.

Esto hace que Ofelia acabe de decidirse en ir en busca de su amor. Bye bye México, hello USA.

Siempre es interesante conocer el pasado de nuestros protagonistas y los hechos o situaciones que les han llevado a tomar las acciones que toman en el presente. Pero, sinceramente, Ofelia no es interesante ni en el pasado, ni en el presente ni lo será en el futuro. Me da toda la pereza del mundo este personaje. No ha aportado absolutamente nada en casi dos temporadas. No sé qué pretenden mostrarnos con ella, pero desde luego que nadie la echará de menos el día en que nos despidamos de ella. A no ser que la cosa cambie. Veremos qué pasa con ella…

Vamos con Madison y cía. Parece que ambos grupos empiezan a relacionarse entre ellos y reina la armonía en el Hotel. Pero como siempre, hay una oveja negra. Y lo que es peor, una oveja negra en forma de madre desesperada por la muerte de su hija y su marido. Ante alguien así, no hay mucha más salida que retenerla contra su voluntad antes que cometa alguna locura. Pero nuestros protagonistas llegan tarde a esta conclusión. En un arrebato de ira, Miss Stowe agarra un cuchillo y ataca al primero que se le cruza. Y la víctima del apuñalamiento es nuestro Víctor. HIJA DE PUTA

Ante este hecho, Madison toma una decisión. Cualquier persona dentro del hotel que se vuelva una localcoño amenaza, será desterrada para siempre.

Esta es la Maddie que me gustaba de la primera temporada y que ha vuelto a resurgir en esta segunda parte. Decisiva, enérgica y valiente, la matriarca de los Clark no titubea en poner las cartas sobre la mesa y hacer lo que se tiene que hacer por el bien común. Bravo Maddie, bravo. Sigo.

¿Algún médico en la sala? Pues resulta que sí, siempre hay uno que ha estudiado medicina, ha tenido a una enfermera como rollete o ha visto un latintutorial en youtube y no le ha dado like ni se ha suscrito, qué cabrón.

Víctor necesita medicinas y Elena sabe perfectamente dónde encontrarlas. Sí, en “El Pelícano” resulta que tienen de todo los tíos, ¿veíais Doraemon de pequeños? Pues ahora el gato cósmico se ha “montao” un súper en Méjico. Se está haciendo de oro el minino.

Una vez dentro descubrimos que Antonio, uno de los hombres de Marco, resulta ser sobrino de Elena (y a su vez hermano de Héctor). Gracias a Antonio, consiguen todo lo necesario para curar a Víctor. Pero como de casualidades está el mundo lleno, y de cotillas mucho más, Maddie y Elena pegan la oreja a la tortura propiciada por Marco a Francisco y así descubre que Nick sigue vivo y está en La Colonia.

Sin ningún tipo de consciencia en el peligro que pueda suponer eso, Maddie se descubre a sí misma mediante las señales luminosas del cartel del hotel. Solo piensa en su hijo, no le importa ni los demás huéspedes, ni su propia seguridad ni, lo peor de todo, la de Alicia. Alicia, harta de ser siempre la comprensiva, echa en cara a su madre que mire más por Nick que por ella. Con toda la razón del mundo.

Alicia, ya lo he comentado en otras reviews, se está haciendo cada vez más fuerte. Es inteligente, valiente y, lo más importante, autosuficiente. Pero no es algo que haya ido adquiriendo desde la epidemia. Con el paso de los episodios, vemos que siempre ha sido así. Desde bien pequeñita, su hermano Nick ha captado toda la atención por parte de sus progenitores debido a sus problemas con las drogas. Alicia siempre ha quedado en un segundo plano y ha sabido salir adelante sin la necesidad de nadie. Y esto le está viniendo de perlas para afrontar las situaciones dadas en este nuevo mundo. Progresa adecuadamente Alicia.

Acabo. A pesar de la mala idea de Maddie, el resultado, a la vez que inesperado, es efectivo. El mensaje no llega a los ojos de Nick, pero sí de Travis. En este episodio se ha ganado un pin, sí señor.

2×13 Date of death

La consecuencia más directa de la metedura de pata de Maddie no se hace esperar: tenemos a medio Méjico en las puertas del hotel intentando entrar sea como sea. Entre ellos, tenemos a Travis que, obviamente, sí consigue el pase VIP. Asistimos al esperado reencuentro de la parejita feliz #pukerainbows

Pero Travis viene solo. Ni rastro de Chris, cosa que habrá hecho saltar las alarmas en muchas de vuestras casas pero que a mí me ha llenado de ilusión y esperanza. I trusted you Travis Manawa 🙁

Vamos con el flashback. Ha sido bastante flojo a mi modo de ver. Han intentado darle profundidad al personaje de Travis e, indirectamente, al de Chris. Pero tengo la sensación que mientras Manawa hijo sigue en la edad del pavo, Manawa padre involuciona. Y no sé qué es peor.

Desde luego que los nuevos amigos de su hijo son unos completos desgraciados, y tiene que ser bastante duro ver cómo Chris se va volviendo cada vez más frío y salvaje. Pero no se puede estar siempre jugando a las casitas. En un mundo así, o comes o te comen. Le falta un poco de mano dura con su hijo, que se le ha subido a las barbas e incluso es reducido por éste en caso necesario. Fatal Travis, fatal.

Y bueno, ya el asco que me da Chris no sé cómo cuantificarlo. No existen múltiplos de 10 suficientes para llenar la pantalla del rechazo que me provoca este personaje. No se puede ser más infantil, lerdo, estúpido, payaso y corto de miras que él. Típico personaje que disfrutaré viendo desangrarse, espero más pronto que tarde. Amsiedah súper.

Resumiendo un poco el flashback, tenemos a James moribundo tras el disparo del señor granjero. Travis se encarga de cuidarlo mientras sus compañeros sudan lo más grande de él. Cuando llega el momento de moverse, Brandon consigue ejercer su poder respecto a Travis y finalmente llevan al herido en la camioneta, el cual será el último viaje de su vida. Ante los ruegos de piedad por parte del herido, Brandon aprieta el gatillo acabando con la vida de su amigo.

Y justo en este momento vemos el destino de Chris. Decide abandonar a su padre y convertirse en el sustituto de James como tercer mosqueperrotero. Pero esta huida no durará mucho tiempo, como vemos al final del episodio. Tenemos al trío calavera delante de la verja del hotel. Bueno, solo vemos a Brandon y Derek… ¿estará Chris también con ellos?

En el hotel, no es que pasen muchas cosas. Además del victimeo de Travis y Maddie por sus respectivos hijos, vemos como la madre coraje le echa cojones bemoles y se decide a contarle a Alicia la verdad sobre la muerte de su padre. Fue suicidio y no dijo nada pensando en Nick. Alicia deserved better, guiño guiño.

Una cosa que me ha parecido rara (y acabo ya con este episodio) es un fallo de raccord durante el episodio. De tener la verja llena de gente queriendo entrar al hotel, pasamos a una imagen en la cual ya han entrado. Imagino que hay alguna escena que ha caído en la postproducción. Gñé.

2×14/2×15 Season finale

Vamos con el doble capítulo que cierra la segunda temporada. Sniff… Empiezo con Ofelia. La muchacha, aparte de ser una nobody, parece que la suerte tampoco la acompaña. Se le estropea el coche en medio del desierto, es atacada por caminantes (¿qué probabilidades hay de encontrarte muertos vivientes en una carretera desierta?), se patea medio Sáhara en busca de ayuda y cuando cree que finalmente la ha encontrado en los militares, descubrimos que no es oro todo lo que reluce. En serio, guionistas, ¿no fue suficiente con la pérdida de sus progenitores? ¿Se va a pasar toda la serie sufriendo esta chica? ¿No ha tenido suficiente con no darle ninguna trama decente en dos años? #TodosSomosOfelia. Hasta el año que viene chica, espero que tu sentido en la serie cobre de algún modo importancia o sino deseo no volverte a ver. Eso sí, el modo badass que ha surgido de repente, mola.

Sigo con Nick. Como era de esperar, Nick se pasa por el forro de sus cojones la dictadura de Alejandro y va en busca de Marco con el oxy robado. Desde luego que hace bastante más por La Colonia que la secta montada por el farmacéutico. Así, Nick descubre el inminente ataque a su pueblo de acogida, cosa que intenta evitar sin erótico resultado. No le queda más que ir en busca de Luciana y huir, huir bien lejos, los dos solos, sin nadie que decida el destino de sus vidas.

Pero las cosas no son tan fáciles y Luciana se niega a abandonar a su gente. Y mucho menos está dispuesta a dejar de lado a su mentor. En efecto, Alejandro los tiene a todos abducidos, incluso a gente con la personalidad tan marcada como la de Luciana. Es más, Luciana se considera su mano derecha. Ella ha sido la primera en dar rienda suelta al predicador de pacotilla sin darse cuenta de las consecuencias que eso acarrearía.

Pero todo lo que sube, baja. Y Alejandro va cuesta abajo y sin frenos. Tras una mordida por parte de un paciente en la enfermería, el castillo de naipes que tenía formado el farmacéutico se desmorona: Alejandro no es inmune y nuca lo había sido. Luciana creyó ver algo que no fue y el enanito gruñón aprovechó la ocasión para montarse su Fort Boyard particular. Demasiado bien le ha ido al maldito lisiado.

Aun así, Luciana decide quedarse por su pueblo, por lo que Nick recurre a la única persona que puede hacerle cambiar de opinión: Alejandro. Éste, moribundo perdido, sigue erre que erre en defender La Colonia del ataque enemigo.

Me parece increíble que el más sensato de todos sea Nick. La evolución de este personaje ha sido brutal. De pasar un deshecho social ha pasado a liderar a todo un pueblo. Qué bien le ha sentado el desmarcarse del grupo principal a este chico. Maravilla de personaje.

Finalmente, Alejandro entra en razón y preparan un plan para cumplir ambas pretensiones: por un lado, huir de la amenaza de Marco y su gente, y por el otro, no permitir la estancia del enemigo en la fortaleza. Dicho y hecho, Nick coge a todo el pueblo como si del mismísimo Moisés estuviéramos hablando y los lleva al campamento militar situado al Norte. Sí, el mismo campamento que captura a Ofelia. Por su parte, el pendejo se inmola por su pueblo y se queda para hacer un último sacrificio que acabará con la vida del enemigo. Bravo.

Pero si hablábamos de la mala suerte de la pequeña de los Salazar, no creeríais que Nick iba a correr mejor suerte, “¿nosierto?”. Los supervivientes son masacrados en su mayoría por los militares. Incluso Luciana es alcanzada por una bala. Lo que parecía por fin un descanso para Nick y su gente, resulta ser la boca del lobo (por suerte para nosotros, que nos gusta más la acción que a un tonto un lápiz). Ojito a la BSO que me ha parecido espectacular.

Ojalá Luciana sobreviva. Me encanta su personaje. Desde luego que ha dado un soplo de aire fresco a un Nick que se hacía un tanto repetitivo. Es fuerte, decidida y luchadora. Ha aportado a la serie mucho más de lo que han hecho la mitad de los personajes principales. Y estoy convencido de que tiene mucho más que aportar, aparte de su trama amorosa, que si me conocéis un poco ya sabréis que es la parte que menos me interesa de cualquier ficción. Además, encajaría perfectamente en el grupo y sería una sustituta ideal de Ofelia. Un cambio de cromos ya, por favor.

Acabamos con la trama hotelera. Aquí sí que hay chicha, pues tras la llegada de Brandon y Derek, descubrimos qué ha pasado con Chris. Pues resulta que no estaba de parranda, sino que estaba muerto chicos. Tras un accidente automovilístico, los Back Street Boys acaban con la vida del pequeño Manawa.

Vaya puta mierda estupidez de despedida. Con las ganas que le tenía y ni tan siquiera vemos la muerte en el presente, sino a través de flashbacks. Merecía algo más lento, doloroso y, sobretodo, algo más de protagonismo. Ha parecido como si se quisieran quitar al personaje de encima de una manera rápida y a otra cosa mariposa. Desde luego que lo han conseguido. Nada y menos van a llorar su muerte los protagonistas, una pena.

Eso sí, su defunción nos ha regalado LA ESCENA de la season finale. Un Travis absolutamente ido descarga su rabia contra todo aquel que se le acerca. Los principales afectados son Brandon y Derek, los cuales son literalmente machacados por el último de los Manawa con vida.

Toda la secuencia me ha parecido muy acorde con el personaje. Esa acumulación de rabia durante tanto tiempo no podía caer en agua de mil borrajas. Travis ha despertado y lo ha hecho por todo lo alto. Espero que la temporada que viene no vuelva a caer en la pasividad más absoluta porque sería volver a la casilla de partida. Así, sí.

Peeeeeeeeeeero, y es un gran pero, dentro del modo berserker en el que ha entrado, se ha llevado por delante a uno de los buenos. Óscar, el novio de la boda, en un intento de calmar a la bestia desatada, se ha llevado un buen golpe, del cual no ha conseguido sobrevivir, ni siquiera tras los intentos de su hermano, apertura de cabeza incluida ¿wtf?

Por lo tanto, siguiendo las directrices marcadas por la propia Madison, Travis debe abandonar la academia el hotel. Y encima tiene que estar agradecido a Elena que no acaben con su vida en ese mismo instante… o no, puesto que los demás integrantes del pacto no están dispuestos a ver cómo sale de rositas mientras su hermano/amigo muerde el polvo. Andreas coge la sartén por el mango y va decidido a acabar con la vida de Travis.

“Ojo por ojo, diente por diente”, espeta Héctor

Dicho y hecho, el hermanísimo apunta con un arma al padre coraje, pero hay una cosa con la que no cuenta ninguno de los ahí presentes: el sigilo de Alicia. La chica, en un arrebato por defender a los suyos, acaba con su vida. Cuidadito con la angelical Alicia, y sino, al tiempo.

Ha estrechado lazos, por fin, con su familia. Ella es la que está dispuesta a todo para permanecer con los suyos, incluyendo a Travis. Pero lo que ni yo, ni creo que nadie esperaba, era que se atreviera a dar el paso de acabar con una vida humana.

Así, no les queda más remedio que huir. Con la ayuda de Víctor, nuestros amigos abandonan el hotel. Eso sí, atrás queda Mr. Strand, que decide permanecer en la zona de confort que le proporciona esta localización.

Me da mucha pena la marcha de este personaje. Para mí particularmente, era el mejor personaje de la serie y el que más me interesaba desde un punto de vista emocional. Espero y deseo que no sea lo último que veamos de él 🙁

Finalmente, Maddie y cía. se dirigen al Pelícano. No está dispuesta a dejar de lado a Nick. Nick es el niño de sus ojos le pese a quién le pese, y ni Alicia ni nadie podrá nunca apartarle de él. Celia lo intentó y ya vimos cómo se las gastó nuestra rubia favorita.

Consiguen dar con el paradero de La Colonia, pero es demasiado tarde. Allí no queda con vida ni el tato. Bueno, Alicia encuentra en las últimas a Alejandro y éste, consigue decirle el destino de la procesión rural. Ahora sí que ns despedimos del falso predicador. In nomine Patris et Filii et Spiritus Sancti, Amen.

Y hasta aquí esta segunda temporada, bastante regulera a mi modo de ver. Capítulos bastante decentes juntos con algunos totalmente soporíferos. Con una primera mitad bastante olvidable, pero con síntomas de mejora en esta segunda. Nos quedamos con bastantes personajes que no sabemos a ciencia cierta si volverán o no la siguiente temporada (Luciana, Víctor, el team hotel, Chris… ¿ha muerto de verdad?), con el inminente encuentro de todos nuestros protagonistas en el campamento militar y con un regustillo a aire fresco que nos viene cara a la tercera temporada.

Sin alargar más el artículo, me despido de todos los seguidores de FTWD agradeciéndoos vuestra fidelidad y vuestros comentarios tanto por aquí como por mi twitter (@nooigo). Pero no os vayáis muy lejos, en 3 semanas os espero a todos con la vuelta de la serie madre. Sí amigos, TWD vuelve a nuestras vidas y todos sabemos que nos deben una resolución tras esa season finale que nos dejó a todos con el culo torcido.

Hasta pronto.

 


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Paco

Productor audiovisual cuando me dejan, seriéfilo 24/7. Me gustaría escribir más, pero siempre lo dejo para mañana. Lost es mi religión y a quién le pique que se "arrasque". Littlefinger deserved better.

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Fear the walking dead 2×12-15: fin de temporada

de Paco Tiempo de lectura: 14 min