Arrow 7×10: ¿Quién es Emiko Queen?

¡Bienvenidos de vuelta! Arrow también vuelve de su descanso navideño con la respuesta a la pregunta ¿quién es Emiko Queen?. Lo que resulta en un episodio entretenido, pero que sigue adoleciendo de algunos fallos en personajes que deberían de estar solucionados y donde desarrollan personajes que no nos interesan en detrimento de los que sí. Olicity, como siempre, es el valor más seguro y es lo que más sobresale en este episodio. ¡Vamos a comentarlo todo!


AVISO SPOILERS SI NO HABÉIS VISTO EL 7×10 NO SIGÁIS LEYENDO Y RECORDAD QUE PODRÉIS DISFRUTAR DE ESTE EPISODIO EL 29 DE ENERO A LAS 22:50 EN SYFY


Oliver ha empezado su trabajo como consultor de la policía. Pero no todo el mundo está contento por eso. Que levante la mano quién se apunte a decirle cuatro cosas a esa técnica.



Oliver lleva algo así como AÑOS viendo escenas del crimen. No necesita que nadie lo increpe sobre cómo funcionan cuando, encima, el pobre aún no había hecho nada. Tampoco entiendo la reticencia de Dinah a que Oliver agilice los trámites. Tal y como él le dice, para algo está ahí no sólo para hacer bulto. Para eso, está más a gusto en su casa con su mujer. Al final, Oliver consigue la prueba y se la lleva a Felicity. Lo que nos recuerda a los viejos tiempos cuando sólo eran OTA. A la magia de esos pequeños momentos entre ellos en los que, ya desde entonces, Oliver sabía que Felicity estaba ahí para solucionar cualquier rompecabezas.




Dicho esto, espero que la trama como consultor de la policía acabe pronto. Porque quiero ver a Oliver como lo que es: un héroe llamado Green Arrow. Cuando sintonizo mi televisor es lo que quiero y espero ver. Es de lo que me enamoré. De un héroe herido y oscuro que cada día luchaba por ser mejor con ayuda de personas que se convirtieron en familia. Esa es la esencia de la serie. No quiero ver un asesor de la policía, de esas series hay miles y yo personalmente sigo otras tantas.



Emiko es la trama indiscutible de este episodio. El capítulo está dedicado a ella. A su historia…a una historia que prometía mucho. Su discurso del principio, sus métodos, sus movimientos, incluso su manera de coger el arco es tan Oliver de la temporada 1 que me es imposible no adorar, sólo por los recuerdos que traen.


Incluso la negativa de Emiko a la ayuda de René es un reflejo del Oliver de la S1. Él tampoco que nadie lo ayudara. De hecho, Emiko le grita a René que su misión es personal. Es algo que también recuerda a los principios de Oliver. Recordemos que Oliver empezó su misión tachando nombres de la misma lista que Emiko y para solucionar los errores de su padre.


Como ya nos habían dejado claro esta temporada, René y Emiko iban a estar conectados (incluso no descarto que él sea su interés amoroso). Al final, Emiko lo busca en una mezcla de necesidad y confianza. Esto es otro paralelismo con Oliver. Así reclutó a Felicity y Diggle. Felicity le ayudó varias veces “sin saberlo” y después se presentó ante ella herido por Moira. Y en cuanto a Diggle, Oliver se la jugó a confiar en él porque lo necesitaba. Es imposible que todo esto no nos llene de nostalgia…sin embargo, todo cambia cuando Emiko confiesa su historia.


Debería haber sido una historia conectada estrechamente con la familia Queen, con personas e historias anteriores…pero no. La madre de Emiko fue una mujer random con la que Robert se acostó. Él las abandonó y la mujer fue asesinada en un incendio. Eso es lo que mueve a Emiko, esa venganza, lo que ella equipara a justicia, para encontrar al asesino de su madre y hacerla pagar. De nuevo, tenemos un paralelismo con el Oliver de la S1. Él también equiparaba la venganza a la justicia. Para él eran sinónimos. Pero hasta ahí acaba el paralelismo.



Mientras que la historia de Oliver estaba perfectamente ligada a Robert y lo explicaba todo la de Emiko no explica absolutamente nada. No explica cómo Emiko sabe luchar de una forma tan parecida a la de Oliver, con su misma arma, tampoco explica cómo tiene la lista de Robert, o por qué va vestida precisamente de Green Arrow y ya no digamos la forma en la que Emiko hablaba con Robert.


En el episodio anterior, vimos cómo ella visitaba la tumba de Robert y le hablaba de Oliver y de su misión, le llamaba “papá”. Si Robert la abandonó como si no le importara en absoluto, ¿por qué Emiko le habla con tanto respeto? ¿Por qué le llama “papá”? Ella debería estar enfadada y odiarlo. Pero no lo hace. Y tiene su lista. Así que está historia no cubre nada de lo importante. Nada de lo que deberían haber contado. Supongo que este es sólo el primer capítulo de la historia de Emiko pero ese ya es un problema de por sí.



La historia de Emiko me entretiene pero no me importa. Me importan Oliver, Felicity y Diggle. Su viaje y su historia. No el viaje de Emiko, ni tampoco su historia. Ni sus sufrimientos ni sus sacrificios. Así que no quiero que se pasen lo que resta de temporada desentrañando los secretos del pasado de una tal Emiko. No, a no ser que nos lleve a algo que recale en Oliver.


Francamente, se ha notado demasiado que este episodio era de transición para que Oliver conociera a Emiko y así hacer que veamos a Thea 2.0. Es decir, sustituir a una hermana de Oliver por otra. La historia tan insulsa y desconectada que le han montado sólo era un medio para ese fin. Por mucho que los productores lo nieguen (sure, Jan) ese es el objetivo principal: introducir a una nueva Thea.


El problema es que Thea estaba desde el principio tenía esa conexión con Oliver…y nos importaba. Emiko no y menos con la historia tan simple que le han montado cuando podían haber hecho algo grande. Es que incluso la forma en la que nos han desarrollado ha sido tan simple que no hay quien se lo crea. Porque no hay quién se crea que Oliver guarde cajas y cajas con recuerdos y posibles secretos de Robert y que esa carta, precisamente esa carta dirigida a Walter, que revela la existencia e identidad de Emiko, esté en unas de esas cajas, encima de todo, por supuesto, para que Oliver la encontrara en el momento justo.



En medio de todo esto, Curtis aparece para recordarnos que existe y se pone a los mandos en el aspecto tecnológico de este nuevo equipo para Emiko. Y aquí tenemos que detenernos porque la forma en la que René dice “necesitamos una persona en la silla” me ha cabreado. Tanto que me quito los Louboutins y le doy de taconazos. Lo dice como si cualquiera puede hacerlo. Da igual que se llame Felicity, que Curtis, que Perico de los palotes. Y no, no todo el mundo puede hacerlo. Necesitas ser un genio para ello.


Este nuevo “equipo” se va de misión y Emiko descubre que el hombre que culpaba de la muerte de su madre no es realmente culpable. Así que el misterio sigue y su misión también. Así que confirmamos que próximamente veremos el capítulo 2 de “Las aventuras de Emiko Queen”. Algo que ni me interesa ni me importa. Realmente espero que esto nos lleve a algún punto y la desconexión que se siente ahora con la historia de Oliver y de la misma serie no sea más que un espejismo.



Emiko se despide con otra dosis de nostalgia estilo Oliver temporada 1. Ese discurso “la oscuridad a veces es la única manera de conseguir justicia”, los nombres que tacha de la lista…todo nos recuerda a esos primeros momentos junto a Oliver. Todo acaba en un punto álgido cuando Oliver se presenta ante Emiko, que era el verdadero objetivo de todo este episodio.


La historia del futuro ha adolecido de los mismos fallos que la historia principal del episodio: ha sido entretenida pero ha tratado sobre personajes que no nos importan, dejando las verdaderas incógnitas y personajes que interesan fuera de todo desarrollo.


René ha sido el protagonista indiscutible de esta trama del futuro. El René que vemos tras 20 años contrasta totalmente con el que vemos en el presente. Mientras que en el presente está dispuesto a hacer todo lo que sea para salvar la ciudad, para sentir que marca la diferencia, en el futuro nada le importa. Es alcalde de Los Glades, que está separada de Star City y es muy próspera.


Su relación con Zoey también es muy distinta. En el presente es adorable y cercana. En el futuro es muy fría y distante. Incluso René le recrimina que Zoey haya hablado con Dinah y haya escuchado sus historias, marcando otro punto de diferencia con el presente. Zoey le explica lo que todos han descubierto sobre el plan de hacer desaparecer Star City, con la esperanza de que René la ayude…pero nada más lejos de la realidad, directamente, no le importa.



Zoey tenía la esperanza de que él hubiera cambiado…pero no. La aplaudo de pie cuando dice: “antes no importaba qué parte de la ciudad estuviera en peligro. Eras un héroe”. ¡Olé! Un héroe real no desprecia así vidas humanas. Oliver jamás lo hizo ni lo hubiera hecho. ¿Qué ha pasado para que René cambie tanto? ¿O era así ya y lo que sucedió sólo lo sacó a la luz ?. Zoey odia en quién se ha convertido su padre y, francamente, yo también.


Dinah también intenta convencer a René. Le habla de Felicity, del plan que ha descubierto…pero él no escucha. Piensa que Felicity era una criminal. Y aquí se demuestra que nunca la conoció. Que nadie la conoció realmente de los nuevos, puesto que Dinah también lo creyó en su momento. A René no le importa lo que suceda en Star City y no quiere “disfrazarse haciendo que le importa”. Aquí cojo mis Louboutins otra vez y le doy muy fuerte. Esta es otra diferencia con el presente, puesto que en ese tiempo, René no duda en “disfrazarse” porque le importa. Y lucha por lo que le importa.


Es justo lo que le dice Dinah y le enseña la Marca de los 4. La marca que se hicieron ella, el mismo René, Diggle, Felicity y Oliver. Ya tenemos los nombres de los que se la hicieron y el nombre de Curtis no está. Atención a eso que creo que será importante más adelante. Ese juramento significó algo, aún significa para Dinah pero, francamente, no sé cuánto porque ella se creyó el cuento de que Felicity era una criminal y le dió la espalda igual que se la dieron todos, tanto en el presente como en el futuro.


Me ha dado mucha pena cuando Zoey se ha ilusionado por un momento al pensar que su padre los podía estar ayudando…Dinah ha intentado animarla pero la decepción que hay en sus ojos es profunda. La decepción es mucho peor que el enfado. Va mucho más allá…y es más difícil de perdonar y olvidar. Ambas descubren la ubicación de las bombas.



Mientras tanto, en la alcaldía, descubrimos que René es quién está detrás del plan para volar Star City junto con su socio. Así que…es malo. René parecía no saber nada sobre la muerte de Felicity. Cuando se lo comenta a su socio, él confirma que ella era un peligro. Atención a esto porque es importante, se confirma que Felicity estaba trabajando encubierta para averiguar qué plan tenían para destruir Star City. Esto significa que, como sabíamos, se confirma que no se había vuelto mala.


A René parece no importarle el asesinato de Felicity…pero en realidad sí le importa. Ese gesto que hace al final…no creo que sea tan malo como pretenden que nos creamos. Felicity estaba encubierta para averiguar qué estaba pasando (y creo que también para averiguar qué había sucedido con Oliver) y creo que René podría estar con ella o no podía saber lo que realmente está pasando pero ahora que lo sabe va a ayudar a salvar Star City. Creo que es más probable esta segunda opción, puesto que parece que Felicity sólo ha confiado en Roy y William para seguir sus pistas.



A pesar de todo esto, Roy y William no están por ningún lado ni se les espera y esa es la historia que realmente nos interesa. René y Dinah no son importantes. Pero William y Roy, además de las circunstancias que los llevaron ahí, por qué William está tan solo, qué sucedió con Felicity y Oliver, Maya…ellos sí son importantes.


Otro eje del episodio ha sido lo que ha sucedido en ARGUS con Díaz. Lo que no avanza nada y también parece desconectado de lo que sucede en el resto del episodio. Ya era grave que Diggle y Lyla lo tuvieran retenido sin decirles nada a Oliver y Felicity. Pero esto ya no tiene nombre. Lyla lo interroga pero Diggle va un paso más allá y le ofrece salir libre a cambio de su declaración. ¡Salir libre! Estamos hablando del hombre que ha intentado matarlo no sólo a él, si no también a Oliver, Felicity, William y el resto. El hombre que les destrozó la vida a Oliver y Felicity y por el cual Oliver sacrificó su libertad y su familia para que fuera capturado. Y John Diggle, el supuesto hermano por elección de Oliver y Felicity, propone dejarlo libre así como así.


Yo también amigo, yo también


Es que…no me lo creo. Este no es mi Diggle. No es nuestro Diggle. Es sólo un extraño. Cuando lo veo en pantalla sólo quiero zarandearlo y gritarle: “¿qué has hecho con John Diggle y dónde está?”. Porque nuestro John jamás habría mantenido algo así en secreto y mucho menos le habría ofrecido la libertad a alguien así. Hubiese urdido un plan con Oliver y Felicity, hubiese encontrado otra forma. Incluso no hubiese dudado en matar a Díaz.


Pero esta…caricatura de John Diggle esconde información importante de Oliver y Felicity y le ofrece libertad a quién destrozó sus vidas. Tengo muchas ganas de que Oliver y Felicity se enteren de todo esto. De la traición de John. Porque es lo que es. No tiene otra palabra más que la más amarga de las traiciones. Quiero ver cómo Oliver y Felicity se enfrentan a él y le dicen las cuatro cosas que se merece. Deseo ver cómo se queda solo y los pierde y, entonces, reaccione. Bien dicen que no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos…creo que Diggle necesita perder a Oliver y Felicity para darse cuenta de la magnitud de lo que está haciendo. Necesita sufrir esa pérdida. Necesita tocar fondo para encontrarse a sí mismo.


No sé qué piensan los guionistas haciendo este despropósito de un personaje tan icónico e importante como John Diggle. Un personaje vital en esta serie. Él está perdido ahora que Oliver no lo necesita tanto pero debe encontrarse de una vez. Como os llevo diciendo tiempo, necesitan darle la vuelta pero ya. Si no lo hacen pronto corren el riesgo de que sea demasiado tarde y de que no podamos perdonar ni olvidar tan fácilmente a John. Por mucho que se sincere con Oliver sobre lo que sucede. Ya nos cuesta hacerlo tal y como están las cosas…así que espero que esa pérdida que necesita Diggle llegue rápido y podamos empezar a reconocer al John Diggle que llevamos amando tantos años.


Al menos, John no ha perdido totalmente su cerebro, y la libertad de Diaz es una manzana envenenada: pretende resucitar el Escuadrón Suicida. La iniciativa de Amanda Waller de misiones con criminales que llevan una bomba en su cerebro. Es cierto lo que le dice a Lyla de que es la tapadera perfecta para seguir investigando. Pero tiene poca lógica que no le confíe lo que está sucediendo en ARGUS a Oliver y Felicity pero se arriesgue a meter a criminales dentro de esa misión. Sobre todo a Díaz.



También se ha equivocado al no decirle nada a Lyla de todo esto. Ella es la directora de ARGUS y John le ofrece un trato a Diaz y anuncia la reapertura del Escuadrón sin despeinarse y sin consultar con Lyla. No ya como directora de ARGUS si no como su mujer. Creo que lo que ella le dice es muy acertado “pensaba que yo era la que estaba en peligro de convertirme en Amanda Waller”. Diggle está siguiendo sus mismos pasos: los secretos, las medidas extremas, la traición a sus amigos…y era John quién estaba preocupado por si Lyla se volvía como ella.


Al final del episodio, nos preparan para el siguiente con un Escuadrón Suicida activo con Díaz como miembro. Un Díaz que jura venganza contra Lyla y me hace poner los ojos en blanco. Un chupito cada vez que Díaz diga “iré a por ti” o cualquier sucedáneo de esa frase. En serio, he perdido la cuenta de cuántas venganzas ha jurado llevar a cabo. Pero que no se esfuerce tanto, sigue siendo el villano más flojo de la serie. Y el más cansino también.


Y llegamos a Olicity. Es el valor seguro del show desde el principio y ahora más que nunca. En este episodio es lo único que he sentido bien desarrollado y que explicaban lo que realmente nos interesa.


Oliver le lleva a Felicity la pista que recoge del escenario del crimen que ha dejado Emiko. Ese beso y esa frase Felicity “algunos maridos les regalan a sus esposas flores y el mío me trae sangre de una escena del crimen. Decían que el romanticismo estaba muerto”, esa sonrisa, esa caricia en la barbilla de Oliver, su sonrisa en medio del beso…toda esta escena completa desde ya está incluida en la lista de sus momentos más tiernos y especiales. Es una magia que traen a la pantalla que echaba de memos. Es tan…natural. Fluye perfectamente, esa química, la sonrisa y el brillo que muestran los ojos de ambos…me han vuelto a enamorar.





Me encanta que la serie tenga continuidad en esto y recuerden que Felicity tenía secuenciado el ADN de Oliver. Así, descubren la verdad sobre el nuevo Green Arrow. La cara de Oliver mezcla desconcierto, dolor, tristeza…y decepción. Está decepcionado con Robert. Otra vez. Cada vez que piensa que ha descubierto los secretos importantes de su padre, que lo conoce y ha leonado a un acuerdo con sus secretos y con el hombre que era, aparece un nuevo secreto más grande que el anterior y lo derrumba todo. Incluido lo que él mismo siente sobre su padre. Trastoca todo su mundo.


Felicity sabe que Oliver no está bien. Que averiguar todo esto lo está rompiendo poco a poco. Su padre lo ha vuelto a decepcionar. Pero está ahí para él. En cada paso del camino. Menos mal que “su esposa es muy buena encontrando gente” porque va a encontrar a Emiko.




Los secretos siguen apareciendo, Moira sabía la verdad sobre esa hija secreta de Oliver. Esto es otro golpe duro. Para Oliver, su padre era importante y lo quería pero su madre tenía, aún tiene, un lugar especial en su corazón. Él sabía que ella también estaba enterrada en secretos y que podía llegar a ser una mujer fría y calculadora. Pero…también vió su lado vulnerable. Llegaron a un entendimiento mutuo. Oliver sabía que los amaba a él y a Thea con todo su corazón. Pensó que sabía lo peor de ella y que ya no le guardaba secretos. Saber que les ocultó esto termina de romper a Oliver.


A parte de esto, Oliver tiene que pensar en qué sucede con Emiko. No quiere hablar con ella porque piensa que si hubiese querido, ella hubiera llamado a su puerta. Pero lo que realmente sucede e que tiene miedo. Tiene miedo de adentrarse en otro secreto más de sus padres, de darse de bruces, de nuevo, con la realidad, de que no eran buenas personas. Y tiene miedo de que Emiko lo rechace. Felicity sigue ahí, a su lado, apoyándolo pero también haciéndole ver que Emiko está gritando por ayuda y debe escucharla.


Cuando Oliver lee la carta de Robert las pocas bases que quedaban sobre los sentimientos había su padre se destrozan. Robert abandonó a Emiko, arruinándole la vida. Simplemente tenía otra familia y desechó a e Emiko como si no valiera nada. Como si no fuera nada. Ese hecho es horrible y Oliver es capaz de verlo tal cual es. Un acto egoísta y horrible de un hombre egoísta.


Es entonces cuando vemos la diferencia con Oliver en sus actos. La historia de Oliver con William fue parecida. Descubrió que tenía un hijo, también su familia a parte de la que estaba empezando a formar con Felicity. Pero mientras que Robert abandonó a su hija sin mirar atrás, Oliver jamás lo hizo. Él cometió sus propios errores pero abandonar a William nunca se le pasó por la cabeza, es más, luchó por formar parte de su vida.


Oliver se da cuenta de las similitudes entre las historias de su padre y él mismo. Por un momento, se ve como un reflejo de él, al fin y al cabo, él también engañó a su pareja de entonces, formando otra familia. Pero lo que Oliver no ve son las diferentes elecciones que él tomó que lo hacen mejor hombre que su padre. Que marcan la diferencia. Oliver cometió errores, sí, es humano, pero nunca abandonó a su hijo cuando se enteró de su existencia. Robert fue egoísta, Oliver no lo fue.



Robert arruinó la vida de Emiko al abandonarla, al desecharla…le duele que su padre haya sido capaz de hacer eso. Incluso le atormenta que, con sus historias tan similares en ese punto, él sea como él. De lo que no se da cuenta es de que centrándose tanto en sus similitudes en vez de en sus diferencias, puede cometer sus mismos errores. Tal y como le dice Felicity, Oliver tiene la opción de desechar a su hermana como hizo Robert o ir hacia ella.


Oliver tiene tanto miedo…tiene miedo de ser como Robert, de hacerle más daño a Emiko, de que está lo rechace…pero debe conquistar esos miedos. Felicity le deja claro que él es mejor hombre de lo que Robert jamás fue. Y es totalmente cierto. Oliver jamás hizo lo que hizo Robert. Oliver es un hombre que se ha sacrificado una y otra vez por sus seres queridos.


Es un auténtico héroe con un gran corazón. Esa es la razón por la que Felicity se enamoró de él. Porque lo vió. Fue la primera persona que realmente lo vió. Así como era, un hombre atormentado pero con un corazón tan grande…dañado pero intacto. Ahora Felicity está haciendo que Oliver se vea a sí mismo tal y como lo ve ella y que no dude de cómo y quién es, sin importar cómo fueran Robert y Moira. Y lo consigue, le hace ver que no debe repetir los errores de Robert y debe hacer lo correcto.




Todas estas escenas son totalmente especial. Desde el principio hasta el final. De hecho, Felicity le pregunta a Oliver como está y mientras que antes hubiese dicho “bien”, ahora es totalmente sincero con ella, no está bien. Está todo lo contrario a bien. Oliver no duda un segundo en confiar en ella, abrirse en canal a ella, poner encima de la mesa sus miedos, sus vulnerabilidades, siendo consciente de que Felicity tiene su corazón en una mano y confiando plenamente en ella para que lo cuide y lo cure. Y eso es lo que ella hace sin dudarlo un segundo. ‪¡Cómo no amarlos!.‬



En el apartado de stunts me han gustado las escenas de Emiko, tiene un estilo Oliver S1 que adoro. La forma de realizar los movimientos, esa disciplina…me ha gustado y creo que es uno de los puntos a destacar del episodio. Sin embargo, he echado muchísimo de menos a Oliver con su traje y peleando. Emiko es buena…pero no es Oliver Queen. Y a estas alturas, quiero ver a Oliver.


CONCLUSIÓN


En conclusión, ha sido un episodio entretenido pero que, si lo miramos más detenidamente, ha sido sólo eso. Pocas escenas han tenido un trasfondo emocional y una historia con personajes que realmente nos importen (Olicity básicamente) y, mientras que la historia de Emiko es entretenida y va bien para un personaje semanal, no han invertido suficiente en su historia de fondo. Se ha notado que ha sido sólo un medio para el fin de que Oliver vuelva a tener una hermana a su lado.


Además, ha habido un sobreprotagonismo de personajes que no nos importan demasiado y que deberían ser más secundarios (René y Dinah). Que, aunque no ha estado mal lo que hemos visto, siempre miraré recelosa cuando sobresalen más de lo que deben, como una consecuencia directa de lo que sucedió en la temporada 6. Sobre todo cuando los personajes que amamos están tan perdidos como lo está Diggle. Porque no es a Dinah y René ni a Emiko a quiénes quiero ver, quiero ver a Oliver, a Felicity y a nuestro Diggle y tramas que giren alrededor de ellos tres y realmente se desarrollen y conecten entre sí.


En definitiva, en general, es un capítulo más de transición que de otra cosa. En una vuelta de mid season deberían haber mostrado algo más potente y que nos dejara pegados a la pantalla. Podrían haberlo echo. Haberlo conectado todo. Haber mostrado como foco principal a Oliver y, junto a él, a Felicity. Y, sobre todo, deberían haberse puesto las pilas con algunos personajes.


Y hasta aquí la crítica del 7×10. ¿A vosotros qué os ha parecido este episodio?. ¡No dudéis en comentármelo!. Nos leemos la semana que viene con el 4×11 “Past Sins” y recordad que podréis ver este capítulo el 29 de enero a las 22:50 en SYFY.


Por Raquel.


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Raquel Morales

Un día descubrí las series, al día siguiente internet y mi vida muggle se fue a la basura. Escritora a tiempo completo, y fangirl como modo de vida.

2 comentarios en «Arrow 7×10: ¿Quién es Emiko Queen?»

  1. estoy de acuerdo con todo, Olicity fue perfecto, pero extraño William. a ambos Williams
    Dig que decepción, me dieron ganas de golpearle,
    yo estaba: este sujeto arruino la vida de tus mejores amigos y le ofreces la libertad, casi mata a Felicity y a William traumatizandos a los dos de por vida (porque que felicity tenga cortinas antibalas grita, estres post traumatico, para mi) y tu le ofreces libertad
    que al final esto no sucedio, pero aun asi.
    la historia de Emiko, no, no, no. Team Emiko, que desepcion.
    Oliver con Dinah de Jefa, no.no.no.no.no.no.no….no
    FW: pobre Zoe… extraño a Wiliam y Roy y a BlackStar… espero que Curtis muera asi no esta en el futuro y a nadie le importa.
    como conclusión: yo amo Olicity, pero veo esta sere por Oliver, por Arrow, por el OTA, los extraños,
    no quiero a NTA, no quiero Team Emiko,
    quiero un Big Bad, a estas alturas no sabemos nada de un Big Bad eso me desconcierta

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Arrow 7×10: ¿Quién es Emiko Queen?

de Raquel Morales Tiempo de lectura: 18 min