American Horror Story 8×10: Brujas VS. Michael, ¡¿la última batalla?!
Ya está todo el pescado vendido. “American Horror Story: Apocalypse”, hace un par de noches, llegaba a su final con un capítulo que nos mantuvo al borde del infarto durante cuarenta minutos de reloj. Desde Seriéfilos Enfurecidos hemos querido coger aire y proceder a cerrar esta etapa de reviews de la serie más longeva de Ryan Murphy.
Si estás listo para saber que sucedió en el capítulo final de Apocalypse te recomiendo tres cosas: tener cuidado con los spoilers, ponerte bien cómodo y ponerte unas bragas nuevas, ¡porque te vas a cagar, chavalote! Empezamos.
Cuando hace unas semanas se estrenaba la nueva temporada de American Horror Story ni por asomo imaginábamos que esto iba a ser más grande que lo de Lourdes. ¡Más grande que lo de Fátima! Bendecidísima que me siento de pies a cabeza, no os voy a mentir.
Al fin volvemos al momento crucial de la trama en el que las brujas proceden a plantarle cara a Michael Langdon. La batalla definitiva, mucho más importante en la historia que aquel Belén Esteban vs Toño Sanchís. Aunque antes, para llegar a ese punto, tenemos que saber como se ha cocido toda esta intervención, que no ha sido moco de pavo, también te lo digo.
Con Myrtle bien informada de los distintos refugios habidos y por haber tras el fin del mundo era la hora de formatear las cabecitas de Mallory y Coco. Vamos, que Cordelia les lanza un hechizo con el que no recordarán quiénes son en realidad y de este modo pasar desapercibidas en el refugio junto al resto de personas. (PD: Ojalá ser sometido a ese hechizo tras hacer un desastre de examen)
Con las brujas infiltradas y resucitadas por la mismísima Cordelia acompañada de Myrtle y, la siempre maravillosa, Madison, llegaba la hora. No sin antes contar con la aparición sorpresa de Marie Laveau (Angela Basset). Aunque bueno, sorpresa, sorpresa, tampoco es que haya sido porque los rumores estaban en el aire desde hace semanas, pero chica, lo hemos gozado desde primera hora como si no supiésemos nada.
Cabe destacar que Dinah, la reina vudú de marca blanca, pasa del culo del resto de brujas y prefiere posicionarse a favor del equipo contrario, cosa que la lleva a morir a manos de Marie Laveau. (¿Alguien sabría explicarme la irrelevante participación de Adina Porter esta temporada? Chica, para esto haberte quedado en casa haciendo croquetas). Por otro lado, Miriam Mead, bueno, el robot de Miriam Mead, también muere y Michael Langdon se queda solo, solito en la habitación. Busca que busca de mi calor, oh.
Recordad que Michael es más poderoso que la mismísima suprema así que en ningún momento nos extrañó que se fuera cargando a todas las brujas de una en una casi sin despeinarse. ¿Nos dolió? Sí, pero se veía venir. Con esta situación tan heavy que les estaba tocan vivir a las brujas solo quedaba un paso para terminar lo planeado: el Tempus Infinitum.
El tempus infinitum, como ya os expliqué, es una movida un tanto rara para viajar en el tiempo y cambiar los acontecimientos. ¿Con qué fin? ¿Advertirle a Beyoncé del altercado de su hermana y su marido en el famoso ascensor? No. Mallory tiene que regresar a la Murder House y deshacerse de Michael Langdon. A simple vista podía parecer una tarea complicada y que nos iba a dar un giro de guión en cualquier momento pero nada más lejos de la realidad.
Tras volver a ver a Jessica Lange merodear por la casa del crimen (por favor, Ryan, haz fija a esta señora para el resto de temporadas de la serie) y vivir un nuevo enfrentamiento de ésta con su nieto Michael, nos topamos con la dura realidad. Con el pastel. Con la mierda buena que veníamos buscando desde hace diez capítulos.
Mallory aparece, cual diva malvada de culebrón colombiano, y atropella al hijo del maligno. Y ojito, que no solo le atropella una vez sino que le llega a pasar el coche por encima hasta tres veces para asegurarse que el chavalito se iba a ir cagando leches para el otro barrio. ¿Maravillosa? Muchísimo.
Con la misión cumplida y habiendo salvado el mundo, Mallory, regresa al aquelarre junto a sus hermanas, las cuáles no son conscientes de que se había acabado el mundo, que ha habido viajes en el tiempo y toda la pesca. Vamos, que ni recuerdan a Mallory, con eso te lo digo todo.
¿Lo positivo de este regreso al pasado para cambiar el rumbo del mundo? Sencillamente que todas las brujas vuelven a estar vivas, incluso Queenie, quién es alertada por Mallory para que no visite el Hotel Cortez y, por supuesto, Constance no se suicida tal y como vimos. ¡Vaya, que la movida esta salido mejor de lo que imaginábamos, colegas!
Para rematar todo esto, Emily y Thimothy, la parejita joven del búnquer, se conocen y tienen un hijo que resulta ser el nuevo Anticristo. ¡Sorpresa! Se ve que las brujas van a tener mucho trabajo durante los próximos años intentando combatir el mal una vez más. Se veía venir que esta panda de who’s no iban a traer nada bueno.
Que maravilla la vida de las brujas. Cuantas cosas interesantes que contar en el día a día. ¿Sabéis que es lo más interesante que he hecho yo durante el día de hoy? Vivir abrazado al váter porque anoche cené demasiada pizza. Si fuese bruja solo tendría que decir “¡Diarreum finis!” y todo acabaría. Pero nena, uno no nació con la suerte de su lado.
¿Qué os ha parecido a vosotros el final de Apocalypse? ¿Ha levitado vuestra peluquita hasta el espacio exterior? Si es así hacédmelo saber. Nos leemos muy pronto, enfurecidos.
Fran Luna
